Expertos en tema del agua y autoridades de la sociedad civil, locales y departamental, se reunieron en Cliza para replicar los modelos de protección de fuentes de agua que ya funcionan en el Cono Sur, buscando garantizar el líquido elemento para consumo y riego en todo el departamento.
Noticias AGRECOL Andes (10/12/2025) Cliza, Cochabamba – Con el objetivo de enfrentar el desafío del agua en el departamento, el municipio de Cliza fue sede de un importante encuentro el pasado 10 de diciembre. Autoridades, técnicos y organizaciones sociales de las cuencas del río Rocha y del río Mizque se reunieron para intercambiar soluciones prácticas sobre cómo proteger las zonas donde nace el agua y asegurar su abastecimiento a largo plazo.
El evento, impulsado por el Gobierno Autónomo Departamental de Cochabamba y la FUNDACIÓN AGRECOL Andes, puso sobre la mesa una estrategia clave: la gestión de zonas de recarga hídrica, conocida popularmente como la «siembra y cosecha de agua».
Aprender de lo que funciona
Carmiña Calderón, técnica social del proyecto Gestión Integral del Agua Cochabamba (GIAC), del Gobierno Autónomo Departamental de Cochabamba, explicó que: “Esta actividad tenía como principal iniciativa reunir a técnicos municipales y organizaciones sociales del Valle Alto y Cono Sur, para por una parte presentar la actividades que se han hecho con el proyecto y luego conocer experiencias de recarga hídrica en otros municipios de la cuenca del rio Mizque, que nos permitan avanzar en la promoción de la seguridad hídrica”.
Durante la jornada, la FUNDACIÓN AGRECOL Andes, representada por Tito Villarroel, Coordinador del Programa Cono Sur, presentó los resultados exitosos logrados en los municipios de Pojo y Aiquile. Allí, gracias al trabajo conjunto entre la sociedad civil y las autoridades locales, se han promulgado leyes municipales y elaborado planes concretos para proteger las fuentes de agua.
«Hemos compartido nuestras experiencias con la esperanza de que sean replicadas en otros municipios. La seguridad hídrica es una preocupación y un desafío común que debemos enfrentar de manera mancomunada«, declaró Tito Villarroel.
Un compromiso de todos: de la montaña al valle
Uno de los puntos centrales del debate fue la necesidad de entender el agua como una responsabilidad compartida. Se destacó que el cuidado de las fuentes de agua no depende solo de quienes viven en las montañas (zonas de recarga), sino también de los usuarios en los valles y ciudades que se benefician del recurso. Por ello, se propuso crear acuerdos sociales y económicos que garanticen la sostenibilidad de estas áreas vitales.
Oscar Zelada, Coordinador de la Cuenca del Río Rocha, valoró el intercambio de técnicas prácticas, como la construcción de zanjas de infiltración y sistemas de cosecha de agua, herramientas fundamentales para retener el agua de lluvia en el suelo.
El obstáculo del presupuesto
A pesar de los avances técnicos y legales, existe una barrera importante. Villarroel advirtió que la falta de recursos propios en los municipios frena una implementación más rápida de estas soluciones. «Los fondos para el desarrollo territorial siguen centralizados en el Estado, lo que impide que los municipios implementen de manera autónoma estas políticas públicas vitales para su desarrollo«, explicó el experto.
La jornada concluyó con el compromiso de seguir articulando esfuerzos entre el Valle Alto y el Cono Sur, demostrando que la colaboración entre instituciones y comunidades es el único camino viable para garantizar agua en cantidad y calidad para el futuro de Cochabamba.






